Dandy, has sido mi hijo peludo. Esto no es un adiós para siempre, pues siempre estarás en mi corazón. Te quise, te quiero y te querré toda mi vida, hasta que nos volvamos a juntar.
Gracias por habernos elegido, porque fuiste tú, y no nosotros, quien eligió. Ha sido un honor haberte tenido en nuestras vidas casi 16 años. ¡¡¡El mejor regalo que tendremos jamás!!!
Hasta siempre mi Dandy.